Recubierto de óxido negro : estas brocas de acero de uso general tienen un recubrimiento particular que asiste para prevenir el óxido y la corrosión.
Estas son las partes más importantes de la anatomía de una broca hss laminada: Longitud total: esta es una especificación sencilla de la longitud física de una broca.
La mayoría de las brocas helicoidales destinadas al trabajo en hormigón tienen una composición particular y cabezas de curvado como caras de carburo y superficies exteriores tratadas con óxido.
Las brocas helicoidales, no obstante, son una excelente alternativa para agujeros chicos. Si opta por brocas delgadas, puede ser muy preciso y estas unidades le aceptan seleccionar fácilmente el ángulo ideal.
Si mueve el dedo desde la parte de arriba del taladro, va a ser como si bajara las escaleras. además del nombre creativo, la broca escalonada ofrece un desempeño versátil y útil.
El tipo de revestimiento que utilice determinará la protección de sus brocas contra la oxidación durante la exposición a la humedad. Además, el revestimiento disminuye la fricción y disminuye el desgaste y los desgarros.
Elegir las broca hss laminada adecuadas para una aplicación específica puede ser estresante. no obstante, tener un conocimiento terminado de los componentes a tener en cuenta antes de elegir una broca puede ahorrarle dinero, tiempo y energía.
Una broca avellanadora, además llamada broca piloto de tornillo, es una broca enfocada para perforar madera. Con solo una acción, la broca puede perforar orificios piloto, avellanados y escariados, lo que le permite avellanar un sujetador e disponer un tapón sobre la cabeza del sujetador.
Son la elección perfecta para fontaneros y electricistas expertos que requieren hacer agujeros grandes y ásperos en la madera. La broca autoalimentada perfora materiales sin presión, lo que proporciona orificios limpios y rápidos.
Broca avellanadora: considerada una broca especial, la broca avellanadora está creada para hacer un orificio piloto con una abertura más ancha en la parte superior para avellanar las cabezas de los tornillos. utilizada primordialmente en madera, la broca avellanadora le permite insertar el sujetador lo suficientemente profundo como para que la cabeza no sobresalga por encima de la superficie del material.